La paradoja de la popularidad de las "autoinstalaciones" energéticas

Es paradójico que las autoinstalaciones —de paneles solares, de baterías, etc.— no sean excepcionalísimas. Desde luego, no se entienden desde primeros principios.

Los primeros principios nos dicen que de haber 1000 personas con 10000 euros cada una y se dan las opciones

  1. cada una usa los 10000 euros en realizar una autoinstalación energética en su vivienda (paneles solares con o sin baterías) vs
  2. juntan esos 10 millones de euros y construyen un parque solar (con o sin baterías)

entonces, la segunda tiene mucho más sentido económico. Por muchos motivos, entre los cuales:

  1. La ubicación de las 1000 viviendas, la orientación de sus tejados, etc. puede distar de la óptima.
  2. Economías de escala: seguro que los 10000 por persona permiten instalar más capacidad (potencia instalada) en una ubicación de mejor aprovechamiento (energía producida por unidad de potencia instalada) que en las 10000 instalaciones individuales.

Sin embargo, se multiplican las autoinstalaciones e incluso son promovidas por las administraciones.

El motivo último —el mundo no es muy irracional, pero no tanto— es fácilmente adivinable.