Confía en mí, estoy mintiendo, etc.
Pese a la aparente contradicción, escribo para recomendar un libro que dudo en terminar de leer: Confía en mí, estoy mintiendo; confesiones de un manipulador de medios.
Como casi todos los libros del género no-ficción pop, está muy sobrado de páginas. Con veinte o treinta más una serie de capítulos opcionales para entretenerse con anécdotas, bastaría. La industria editorial prefiere aferrarse a la tradición que establece las dimensiones físicas mínimas de ese objeto que llamamos libro que a mantener un ratio razonable entre ideas relevantes y número de palabras. Pero ese problema endémico en todo el género no quita para que este sea un librito más recomendable que muchos otros.