Ruido

Bendito fútbol

El fútbol es poco más que ruido, ruido de fondo. Pero es un ruido tan familiar que estamos hechos a él, que ni lo oímos. Solo ocasionalmente produce alguna molestia menor.

Pero, ¿qué pasa si desaparece el ese ruido? Entonces comienzan a ser audibles otros sonidos más desagradables, entrometidos y molestos. Un mundo sin fútbol no es un mundo en pacífico silencio sino uno de continuas estridencias.

Bendito fútbol.

El "trabajo profundo" y su relación con el "ascensor social"

Tengo piendiente leer el libro Deep work por culpa de estas notas.

Cuya lectura me hizo pensar en otro tema muy tangencial. Porque el libro parece estar dedicado a la importancia (¿hace falta subrayarla?) del trabajo profundo y de una serie de consejos y pŕacticas para poder llevarlo a cabo. Y ahí —¡nada menos!— se queda.

Pero es muy difícil poder realizar —quien lo probó lo sabe— cualquier tipo de actividad mínimamente asimilable al trabajo profundo inserto en las clases bajas. Existen muchas definiciones extrínsecas de clase baja, en función de la renta, del nivel de estudios, del código postal de la vivienda, etc. Pero la definición intrínseca —de nuevo, quien lo probó lo sabe— de clase baja es el ruido, los televisores a todo volumen, las vecinas que gritan, la excavadora que da marcha atrás, el perro que ladra y los de siempre que se llaman de todo de madrugada. En resumen, todo aquello que dificulta o imposibilita el trabajo profundo.