Oferta vs abundancia vs asequibilidad
Hay tres términos en boga, todos relativos a un mismo tema, cada uno asociado a un rango del espectro político unidimensional:
- Oferta, favorecido por “la derecha”: nuestras angustias económicas son consecuencia de la falta de bienes y servicios y que su producción está constreñida por regulaciones, impuestos y zarandajas de todo tipo.
- Abundancia, asociado a posturas centristas y que es lo mismo con algún sutil matiz para hacerlo más fácilmente digerible a gentes situadas más a la izquierda. En el fondo, hay cierta relación entre la diferencia entre oferta y abundancia y entre fraternidad y solidaridad. Solidaridad es un reemplazo que se buscó a fraternidad en cierto momento histórico porque el término original tenía cierto olor a incienso.
- Asequibilidad, que es la aportación de la izquierda uniceja al debate. El término describe la pretensión de que todo sea barato de manera más o menos taumatúrgica y con absoluto desprecio hacia los efectos dinámicos de la fijación de precios.
Scott Sumner, al respecto, ha escrito Output is abundance is affordability, artículo que ChatGPT resume (con mis arreglos) así:
- Los términos producción (output), abundancia y asequibilidad (affordability) están íntimamente relacionados: más producción significa más bienes, lo que genera abundancia y, por tanto, hace que esos bienes sean potencialmente más asequibles.
- En el contexto de la vivienda y los automóviles nuevos, el autor sugiere que no tiene sentido forzar que sean asequibles artificialmente si no se produce lo suficiente: el problema real es la falta de producción, no el precio per se.
- Denuncia políticas como control de alquileres o exigir que una parte de las viviendas nuevas sean para compradores de bajos ingresos: estas medidas actúan como un impuesto a la nueva construcción, reduciendo la cantidad total de vivienda que se puede construir.
- Para él, esas políticas bienintencionadas tienen el efecto contrario: disminuyen la producción, lo que lleva a menos abundancia y, paradójicamente, a una menor asequibilidad.
- Así que aboga por aumentar la producción (más casas, más coches, etc.) como la forma más efectiva de mejorar la asequibilidad a largo plazo, en lugar de medidas reguladoras que limiten la oferta.
- En su argumento también hay una crítica implícita al modelo económico centrado en los servicios: según él, si una economía no produce suficientes bienes tangibles (viviendas, bienes físicos), puede haber escasez en esos sectores.