¿Debería elaborarse un "barómetro à la CIS" entre los "artistas contemporáneos"?
La entrada de hoy versa sobre el siguiente vídeo:
En él, la autora, Paloma Hernández sigue varias líneas argumentales más o menos entremezcladas, de entre las que rescato la siguiente:
- El mundo del arte contemporáneo en España está dominado por ciertas ideologías. En particular, la autora da a entender que entre los artistas contemporáneos que exhiben sus obras en los circuitos habituales en España existe un consenso básico en cuestiones que en la población general son problemáticas: el aborto, los toros, el feminismo, la inmigración, el neoliberalismo, la derecha, la izquierda, etc. Por abreviar, la autora la identifica con posturas de izquierda.
- Que eso es así porque las instituciones que gestionan los fondos de promoción del arte contemporáneo, las que dan acceso a becas, exhibiciones, estancias, etc., están controladas por una estrecha élite que participa de esas ideologías singulares y que las promueven activamente desde sus posiciones de poder. Lo hacen, además, bloqueando el acceso a esos recursos a artistas que no son de su cuerda ideológica.
- Que detrás del fenómeno anterior se encuentra la pervivencia del krausismo en España, enquistado en determinados puestos —menciona explícitamente ciertas cátedras de estética— y quienes los ostentan.
Estos argumentos se mezclan, como digo, con otros sobre los que me es mucho más difícil pronunciarme y que no sé siquiera si podré transcribir fiel a la intención de la autora. A saber: